Tal vez los que saben dirían que de carne y hueso... tal vez los que saben más dirán que de genomas y herencias minúsculas que predicen cada uno de nuestros movimientos y hasta malestares... Pero yo creo que los que verdaderamente saben, no se atreven a adivinar eso que nos conforma.
Yo no sé mucho, es más, creo que en el tema no sé nada... y es por eso que busco.
Me atrevo a adivinar que simplemente no podemos adivinar... Lo que sí me queda claro, es que no andamos solos. No soy sino somos... y no estoy sino estamos.
A lo largo de nuestras vidas vamos recolectando cosas, personas y momentos mágicos en nuestro morral... creo que eso va diciendo un poco de lo que estamos hechos; algo así como un mosaico lleno de colores que platican historias de Vida. Tambien creo que cualquier intento de ponerle nombre se queda corto... y por eso creo también que somos misterio. Me encanta el misterio. Me fascina no saber y quedar perpleja ante la maravilla humana. Me encanta sorprenderme con la autenticidad de cada uno... de lo Vivo!
Eso hace la vida entretenida, eso nos permite alejarnos de las rutinas y lo establecido... todos somos un mundo tan único como misterioso, y eso: es fascinante. Qué buena puntada esa de Dios, la de hacernos así diversos, de todos los colores y sabores, diferencias padrísimas que Él mismo sigue inventando siempre.
De qué estoy hecha... podría pues decir: de todos, de todo, de ustedes, de mí... de lo que ha sido, de lo que es, y de lo que viene... pero sobre todo... del Misterio... de ese Misterio que me da pistas de luz de vez en cuando, para seguir buscando.
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